.
Mariposas ciegas
tocan con sus alas rotas
a mi puerta
Abro las ventanas para que entren
y tomen un café conmigo
que estoy sola
y hace viento
pero ellas se empecinan
en seguir con su diatriba táctil
a mi puerta
Llamo al perro
para que las corra a dentelladas
y no viene
parece ser que por ciertas caninas razones
él también prefiere la entrada por la puerta
El gato sí querría seguro
espantarlas con maullidos
y en caso de suicida terquedad
deshacerlas con sus uñas rojas
Pienso
Y a fin de cuentas no lo llamo
porque me molesta el polvo
de las mariposas muertas
que sella mi puerta
Entro y salgo por ventanas
chimena, tubos de ventilación
mangueras...
Pero ya nunca por la puerta
Las mariposas ciegas no lo entienden
y siguen tocando con sus alas rotas
a mi puerta.
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario