"Si supieras, seguí tu cuerpo hasta perderte. No sabes que con tu ausencia, el barco se me hizo de papel y en su cubierta me hunden los corales. He pasado muchas horas buscando adónde ha ido a parar la gente. Desde entonces, no descubro la multitud. Uno a uno se han esfumado los oficiales, las máquinas cambiaron el rumbo y la rosa náutica persigue los astros. ¿Qué has hecho de las razonables brújulas?" Francisco Mir, en Proyectos de olvido y Esperanza
lunes, 12 de octubre de 2009
. Piedra lavada sácame del río azul del sueño en que me sueño que soy una piedra lavada por el río .
Precioso poema del espejo de aquello que temo en espejo...
ResponderEliminarAbril, sí. El cuento de no acabar. Seguimos siendo lo que somos
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